miércoles, 4 de enero de 2012


En la mía muero de frio dolor,
En la suya siempre esta su calor,
En la mía siempre la soledad viva,
En la suya la juventud de besos.


La claridad del sol al entrar en la suya al amanecer,
La oscuridad de la mía cada noche vacía de tu olor,
Separan el miedo de nuestros cuerpos y lo guarda.


En la mía y en la suya hacen de piel caricias,
En las dos se hablan las verdades y mentiras,
En las dos se hacen realidad los sueños vivos,
En la tercera viviremos juntos para siempre.


La cama es la que cuenta a los dioses nuestros pecados,
La que recoge nuestras lagrimas de satisfacción y de dolor,
La única que no puede mentir sobre nuestro amor cielo,


Y en sus costillas juntas su piel resucitare cada mañana caliente,
Después de haber muerto en tus brazos aquella noche anterior.

1 comentario:

  1. A mí también me gusta mucho el tuyo. Me pasaré a leer más poemas cuando tenga tiempo. Gracias. Un beso.

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